Un tercer político ha sido asesinado en menos de una semana en México luego de que las autoridades hayan confirmado el deceso de José Remedios Aguirre Sánchez, candidato a la presidencia municipal de Apaseo el Alto en Guanajuato.
El candidato por el partido Movimiento Regeneración Nacional (MORENA) fue asesinado a balazos mientras se encontraba en el Parque Ecológico de esta ciudad con otra persona aún no identificada. Según los primeros reportes, los asaltantes escaparon en un automóvil de color rojo y con placas extranjeras.
Aguirre Sánchez se suma a las muertes de otros dos candidatos a cargos públicos en las elecciones a realizarse en julio próximo. El pasado 4 de mayo fue asesinado Addiel Zermann Miguel, candidato a la alcaldía de Tenango del Aire en el Estado de México.
El cuerpo de Addiel Zermann, precisamente también candidato por MORENA, fue encontrado en el municipio de Ixtapaluca. Según las indagaciones iniciales de la Fiscalía su asesinato se debió a un intento de asalto.
El martes 8 de mayo también fue encontrado el cadáver de Abel Montufar Mendoza, candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la diputación de Tierra Caliente de Guerrero. El cuerpo fue encontrado dentro de una camioneta en el municipio de Ciudad Altamirano.
Tras la ola de asesinatos a políticos que ha estado asediando a México, los líderes de los diferentes partidos políticos (PAN, PRI, MC y MORENA) se han manifestado reprochando a la Secretaría de Gobernación la falta de garantías en cuanto a la seguridad de los candidatos.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos también se pronunció este viernes y manifestó su preocupación ante la situación especial de riesgo a los actores políticos en México. El organismo también se mostró confiado en que México va a realizar “las investigaciones pertinentes de manera eficaz, y en estricto cumplimiento de las garantías del debido proceso”.
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