El panorama es catastrófico en Puerto Rico con el paso del huracán María, el más potente que ha golpeado el archipiélago. Los edificios tiemblan, los techos vuelan y las ventanas estallan por todas partes, debido a los fuertes vientos y lluvias.
Este es el segundo huracán que azota el Caribe este mes, tocando tierra en Yabucoa, una localidad al este de la isla que cuenta con 3,4 millones de habitantes. Con vientos sostenidos de 233 kilómetros por hora (kph) y fuertes marejadas, la vista es de destrucción incluyendo toldos y canaletas destrozadas que cuelgan de los edificios o caen arrancados por completo.
En las casas, los inodoros desbordan el agua y emanan fuertes gases, debido a que el huracán sacudió los sistemas de alcantarillado. A su paso por el Caribe, el huracán María ha dejado hasta el momento un total de nueve personas fallecidas en las islas de Dominica y Guadalupe, que fueron prácticamente arrasadas por vientos cercanos a los 200 kilómetros.
Las autoridades del archipiélago francés de Guadalupe reportaron dos muertos, en tanto que en Dominica el gobierno advirtió sobre una “total devastación” que causó 7 víctimas fatales.
El asesor del primer ministro de Dominica, Hartley Henry, manifestó que “es difícil determinar la cifra de muertes, pero hasta ahora se han confirmado siete como resultado directo del huracán”.
Por su parte, el gobernador de la isla, Ricardo Rossello, expresó “no hemos experimentado un evento de esta magnitud en nuestra historia moderna”. Asimismo, el Gobierno activo 500 albergues para refugiar a los damnificados.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (CNH) pronosticó que María provocaría lluvias de unos 63,5 centímetros en partes de la isla y desenlazaría marejadas de hasta 2,7 metros. Las intensas precipitaciones podrían provocar deslaves e inundaciones, amplió el reporte.