El incendio Thomas ha carbonizado aproximadamente 95.000 hectáreas hasta la fecha, ha informado la agencia estatal Calfire y, aunque afortunadamente, en las últimas horas el fuego solo ha avanzado mil hectáreas, únicamente un 20% del incendio ha sido contenido hasta el momento.
Este es el quinto incendio más grande en la historia de California, comunicó Eric Boldt, meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional de Los Ángeles. Y el más grande de los seis focos que han estado consumiendo todo a su paso desde el pasado lunes.
Cerca de 6.400 bomberos han luchado para apagar las llamas en los incendios que asolan el sur de California, alimentados por la falta de precipitaciones y los fuertes vientos. Los meteorólogos han advertido que “los vientos soplarán a una velocidad de hasta 65 kilómetros por hora”, a su vez las autoridades de salud pública pidieron a las personas usar máscaras para protegerse de las cenizas y el humo.
El piloto de combate retirado Don Thompson, propietario de una granja de aguacates en Carpinteria, cerca de Santa Bárbara, describió la pérdida de la casa de su hermano fallecido hace cuatro años como “el final de una era” para su familia: “Él mismo construyó esta casa”, se lamentaba señalando dos humeantes chimeneas de piedra, únicos restos de la vivienda.
A pesar de esto, admitió que incluso en medio de los esfuerzos por salvar sus propiedades, se había sentido intimidado por la “majestuosidad” de las enormes llamas. “Es destrucción, pero sigue siendo naturaleza y tenía algo de belleza”, añadió.
Los incendios han quemado más de 100.000 hectáreas de tierra y forzado la evacuación de cientos de personas. El gobernador de California, Jerry Brown, advirtió que los incendios forestales que azotan su estado deberían servir de advertencia para otras partes del mundo amenazadas por el cambio climático.
“Es un indicador real de los problemas que están por venir y con suerte servirá para concienciar a esas personas que aún se muestran escépticas”, señaló el alcalde.
Los expertos aseguran que el calentamiento global aumenta el riesgo de incendios fuera de control, por la falta de humedad en la vegetación, lo que la hace más inflamable y propensa a la combustión espontánea o provocada.
Hasta ahora las autoridades informaron solo la muerte de una mujer de 70 años, que sufrió un accidente automovilístico mientras huía del fuego. Este ha sido el año que más víctimas mortales se han cobrado los incendios forestales en California. Más de 40 personas murieron en octubre cuando el fuego arrasó los condados productores de vino del norte de San Francisco.
Incendios en California consumen miles de hectáreas y arrasan zonas residenciales