Un terremoto de 3,8 grados de magnitud golpeó ocho millas al sureste de Lincoln, la capital del estado de Nebraska, Estados Unidos a las 5 a.m. del martes por la mañana. Con este último, ya se suman al menos seis sismos entre 2.5 y 3.8 grados, registrados desde el pasado 9 de abril.
Mientras que los informes iniciales de la Encuesta Geológica de los Estados Unidos midieron el terremoto como una magnitud de 4,3, la cifra se bajó de categoría a media mañana. El USGS actualiza con frecuencia la magnitud en las horas y los días posteriores a un terremoto a medida que hay más datos disponibles y se completan más análisis.
Asimismo, el USGS ubicó el epicentro de este último terremoto a solo ocho millas de Lincoln y 21 millas de Avon. Lincoln Volunteer Fire Rescue ha pedido a los residentes que les informen sobre cualquier daño, “incluso si se trata simplemente de cosas que han caído de las paredes o los estantes”.
Según el jefe de bomberos voluntarios de Lincoln, Zach Muse, “fue un golpe bastante duro”. Los demás terremotos registrados durante la semana, se han originado cerca de la ciudad de Arnold, una comunidad de 600 personas al noreste de North Platte.
Un funcionario de Arnold indicó que no tiene conocimiento de ningún daño o lesión. Por lo general, el daño no ocurre hasta que la magnitud del terremoto supera los 4 o 5, según el Servicio Geológico de los Estados Unidos, con sede en Colorado.
Por su parte, John Bellini, del Servicio Geológico de Estados Unidos, con sede en Colorado, expresó que no es inusual que los terremotos golpeen en la misma área en días consecutivos, y no hay motivo de preocupación.
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