La crisis socieconómica que azota a Venezuela, ha creado un ambiente de caos entre sus ciudadanos, quienes día a día deben luchar contra la incontrolable inflación y escasez de alimentos.
Durante los últimos meses la economía solo ha empeorado, causando que el sueldo que perciben los venezolanos no alcance para subsidiar la canasta básica alimentaria.
Debido a esto, miles de personas han tomado la difícil decisión de emigrar, con el objetivo de conseguir mejores condiciones de vida que les permitan tender una mano a su familia y amigos.
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Al estilo de los denominados “balseros” cubanos, cuatro venezolanos iniciaron una travesía el miércoles 10 de enero, en donde pretendían llegar a Curazao a bordo de una embarcación clandestina, perdiendo la vida en el intento desesperado de salir de Venezuela.
El diario local Noticias Curazao, informó que la Guardia Costera del Caribe Holandés, descubrió el bote a la altura de Koraal Tabak. Allí, encontraron a un grupo de personas que aún se encontraban con vida, pero también hallaron los cadáveres de tres hombres y una mujer.
Las autoridades no revelaron muchos detalles del caso, pero señalaron que un helicóptero se encargará de sobrevolar la zona de búsqueda, con la esperanza de conseguir otras embarcaciones ilegales y poder salvar la vida muchas otras personas, que decidieron poner en riesgo su vida para emigrar.
Durante el año 2017, Curazao realizó una alerta sobre el éxodo masivo de venezolanos a sus tierras, lo que los obligó a aumentar las medidas de seguridad que les permitiría frenar una crisis migratoria.
Muchas de estas embarcaciones salen de la costa venezolana hacía la isla, con ciudadanos que con desesperación anhelan un mejor futuro, cancelando hasta 200 dólares por el servicio.
