A pesar de la “tregua olÃÂmpica†que supone la inauguración de los Juegos OlÃÂmpicos de RÃÂo 2016, el Senado de Brasil avanzó en el juicio de destitución de la mandataria suspendida, Dilma Rousseff, quien es acusada de efectuar varios delitos fiscales.
El juicio que inició el pasado 12 de mayo, entró en su fase final luego de que el Senado Senado fue notificado oficialmente de que el proceso contra Rousseff continúa tras la aprobación de un informe que la acusa de “atentar contra la Constituciónâ€Â.
Brasil ha sido escenario de múltiples marchas tanto a favor como en contra de Rousseff, sin embargo, de acuerdo a varios medios locales, la convocatoria a manifestaciones para exigir el retorno de la presidenta al poder tuvo escasa respuesta y solo unos pocos millares de personas la respaldaron.
El informe presentado al Senado, solicita la destitución inmediata y absoluta de Dilma Rousseff como presidente de Brasil, los congresistas son quienes decidirán el futuro de la mandataria suspendida, una vez que realicen la votación decisiva, ya que en la primera vuelta obtuvo más votos a favor de su destitución.
Por otro lado, un documento elaborado por la FiscalÃÂa afirmó que el ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, participó activamente en las corruptelas de la estatal Petrobras, donde estuvo al frente de la administración, durante los 13 años de mandatos de Rousseff.
El paÃÂs suramericano enfrenta una de las crisis polÃÂticas más graves de las últimas décadas, debido a una serie de escándalos por corrupción, asimismo, se encuentra en un proceso de desaceleración económica importante. Las problemáticas de Brasil calaron en gran manera en los Juegos OlÃÂmpicos de RÃÂo 2016, donde incluso la mayorÃÂa de los lÃÂderes mundiales declinaron la invitación para asistir a la ceremonia central.