Mantener la juventud y la belleza es una de las preocupaciones más frecuentes de la sociedad actual, muchas personas se enfocan tanto en implementar métodos quirúrgicos para tratar de verse jóvenes, que ignoran los beneficios que una alimentación saludable puede darles.
Cambiar los hábitos alimenticios, no solo puede hacer que nuestro cuerpo transmita un aspecto hermoso, sino que también mejora la salud y el bienestar general. En su mayoría los alimentos frescos contienen propiedades que son beneficiosas para nuestro cuerpo, pero algunos de ellos poseen sustancias llamadas antioxidantes, que contribuyen a retrasar en envejecimiento de las células.
Los antioxidantes, se pueden encontrar de forma natural en muchos alimentos y tienen un efecto de rejuvenecimiento, ya que retrasan el proceso natural de oxidación de las células, gracias a que contienen vitaminas, minerales entre otras sustancias químicas que son esenciales para el cuerpo humano.
Aunque todas las frutas, verduras y alimentos no procesados, ofrecen grandes beneficios a nuestra salud, existen algunos alimentos que tienen una mayor concentración de sustancias antioxidantes por lo que incluirlos en el menú diario aporta cuantiosos beneficios a tu calidad de vida, algunos de ellos son:
Tomate
Es una de las hortalizas más utilizadas en las comidas en todo el mundo y resulta una excelente fuente del antioxidante licopeno. Esta sustancia, tiene un rol importante en la liberación de radicales libres y ayuda a combatir la oxidación de las células.
Asimismo, el tomate tiene propiedades cicatrizantes y antiinflamatorias, actúa como un desintoxicante e incluso elimina el plomo de la sangre. Para el cuidado de la piel es un gran aliado, ya que puede ser usado para tratar el acné, lesiones causadas por la exposición al sol y prevenir el cáncer de piel.
Brócoli
Está considerado como una súper verdura, debido a que contiene altas cantidades de vitamina A, beta caroteno, niacina, vitaminas B1, B2 y B6, vitamina C, E y ácido fólico.
Es una excelente fuente de antioxidantes que además de proteger la piel, contribuyen a mejorar la salud de todo el cuerpo. El consumo frecuente del brócoli, ayuda a disminuir las bacterias estomacales y refuerza el sistema inmunológico.
Mango
Esta fruta originaria de Asia, contiene grandes cantidades ácido málico, palmítico, p-cumário y mirístico, además, aporta vitaminas A, C y E. Las propiedades antioxidantes del mango, ayudan a reparar las células de la piel, prevenir infecciones cutáneas, regular la caída del cabello y optimizar el sistema inmunológico.
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