Las vÃÂctimas de violencia doméstica pueden romper su contrato sin penalización económica, gracias a una nueva ley en la provincia.
Esta enmienda fue propuesta en noviembre pasado por la diputada de Calgary-Bow, Deborah Drever, para cambiar la Ley de Inquilinato.
Las vÃÂctimas tendrán que presentar un documento al propietario, demostrando que están en riesgo en su situación actual. El objetivo es reducir las barreras financieras que impiden a las vÃÂctimas, en su mayorÃÂa mujeres y niños, para romper el ciclo de la violencia, de acuerdo con Deborah Drever.
El inquilino que desee abandonar su vivienda debe presentar una orden de protección de emergencia emitida por el tribunal o una carta de un profesional certificado – tales como médicos, enfermeras, trabajadores sociales o psicólogos – que demuestran que el inquilino/a o los niños están en peligro.
El documento debe ser presentado al Departamento de Servicios Humanos, que en menos de siete dÃÂas, devolverá un certificado que permita a la vÃÂctima cancelar su contrato de arrendamiento.
La ley debe también permitirles a las vÃÂctimas tener acceso a servicios especializados para ayudarles, según la provincia.