En el Otkrytie Stadium de Moscú, la selección argentina capitaneada por Lionel Messi empezó su participación en la Copa del Mundo con empatando ante Islandia.
En el inicio del encuentro fue Islandia la que avisó primero. Luego de presionar la salida albiceleste, Birkir Bjarnason no pudo aprovechar un buen pase de Sigurdsson y termino definiendo desviado. Iban apenas 8 minutos.
Argentina no pudo inquietar durante los primeros 15 minutos, pues aunado a la buena presión de Islandia, los propios jugadores argentinos no se animaban a profundizar en busca del arco defendido por Halldórson. La única llegada con remate al arco fue en un saque de falta que cabeceó Tagliafico, pero salió desviado.
La primera intervención del meta islandés llegó al minuto 16, cuando Lionel Messi remató desde unos 30 metros y Halldórson desvío con los puños. Dos minutos más tarde llegaría la primera anotación de la tarde.
Marcos Rojo agarró un balón al borde del área e intentó un remate al arco, el balón cayó en los pies de Sergio Agüero quien de espaldas al arco aguantó la marca del defensa y logró darse vuelta para definir con un terrible remate de pierna zurda. Era el 1 – 0 al minuto 18.
Pero la ventaja no duraría mucho. Cinco minutos después del gol de Agüero, Alfred Finnbogasson empataría las acciones luego de aprovechar un rebote dejado Wilfredo Caballero tras un centro rastrero de Bjarnasson.
Islandia sorprendió a Argentina durante la primera media hora con su presión alta sobre los defensas para tapar la salida y el cierre de espacios que no dejaba margen de maniobra a Messi y Ángel Di María. El juego largo de Islandia, buscando a sus delanteros, complicó mucho a Otamendi y Rojo, pareja de zagueros argentinos.
El primer tiempo finalizó con el empate a un tanto, pero con la sensación de que Islandia, aun a pesar de sus limitaciones, mostró mejor cara que Argentina.
El segundo tiempo comenzó con la misma tónica del primero. Islandia cerraba espacios y aprovechaba la velocidad de sus hombres para hacer daño al contragolpe y Argentina no lograba darle un sentido ofensivo a la posesión del balón.
Al minuto 53 Ever Banega entraba en la cancha en lugar de Lucas Biglia. La entrada del rosarino le dio a Argentina una mejor circulación de balón y otra posibilidad a Messi para buscar el juego asociado con el mediocampo.
Al 63 el árbitro polaco Szymon Marciniak pitaría una pena máxima a favor de Argentina por un derribo sobre Maxi Meza. El meta Halldórson se erigió como la figura al atajar el remate de Lionel Messi.
Los espectadores del Otkrytie Stadium debieron esperar hasta el minuto 80 para ver otra opción de gol. Fue Messi, otra vez. Un remate desde el borde del área, en la medialuna, pasó a centímetros de la meta islandesa.
Cristian Pavón al minuto 86 exigía a Halldórson. El delantero de Boca Juniors centró un balón al área al que no pudo llegar ningún delantero pero que se metía. Una mano providencial del islandés salvó su valla.
Durante la segunda mitad se pudo observar a Argentina con mejor circulación de balón, sobre todo tras la entrada de Banega, y con mejor intención de ataque al agregar a Cristian Pavón por la punta izquierda. El hábil delantero complicó mucho a Saevarsson y a punto estuvo de marcar el gol de la victoria.
Ahora la albiceleste debe reponerse de este resultado impensado, pues se enfrentó, en teoría, al rival más débil del grupo. La próxima para será en Nizhni el próximo jueves para enfrentar a Croacia.