La selección francesa de fútbol se convirtió hoy en la nueva bicampeona del mundo, junto a Uruguay y Argentina, luego de derrotar a su similar de Croacia por 4 – 2 en un encuentro que estuvo plagado de emociones.
Aunque fueron los croatas los que llevaron la iniciativa y las riendas del encuentro, la practicidad del juego francés les permitió resistir los embates balcánicos y, gracias al balón detenido, golpear en el momento justo para empezar a manejar el encuentro.
Antoine Griezmann se erigió en la gran figura del elenco campeón administrando bien el balón y distribuyendo el juego para sus compañeros. Varane y Umtiti fueron un verdadero muro en la zaga mientras que Mbappé complicaba con su velocidad en ataque.
Croacia demostró un juego digno de la calidad de sus hombres: Brozovic y Rakitic se hicieron los dueños del mediocampo mientras que Luka Modric aportó toda su experiencia y calidad en función de ataque.
Al final, el triunfo fue para los dirigidos por Didier Deschamps quién también se anota en la historia de los grandes del fútbol mundial: Es apenas el tercer hombre que logra ser campeón del mundo como jugador y entrenador tras Mario Zagallo y Franz Beckenbauer.
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