Santos pide perdón en nombre del Estado por asesinatos de izquierdistas

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, pidió perdón nombre del Estado por los crímenes que sufrieron numerosos miembros del movimiento político de izquierda Unión Patriótica a manos de narcoparamilitares y militares corruptos durante los años de 1980 y 1990.

“La persecución de los miembros de la Unión Patriótica fue una tragedia que conllevó su desaparición como organización política y causó un dañó indecible a miles de familias y a nuestra democracia”, precisó Santos.

En medio de un acto celebrado en la sede de Gobierno, el Palacio de Nariño, donde también estaba presente la presidenta de la UP, Aída Abella, el mandatario reconoció que el Estado no tomó las medidas pertinente para evitar la perdida de vidas humanas a pesar de que era indiscutible la violencia que padecían los activistas de la agrupación izquierdista. “Esa tragedia jamás debió haber ocurrido”, agregó.

“La paz es perdón, la paz es reconciliación, la paz es reencuentro, pero la paz también es admitir responsabilidades y hacer el máximo esfuerzo posible para responderles a las víctimas”, indicó el gobernante colombiano.

Cabe recordar que Abella vivió muchos años en el exilio tras resultar ilesa de un atentado en el año 1996 perpetrado presuntamente por paramilitares. De acuerdo a organismos de derechos humanos y autoridades judiciales, unos 3.000 políticos y simpatizantes de la UP fueron asesinados por narcoparamilitares de ultraderecha y militares corruptos.

Por su parte, el senador de izquierda Iván Cepeda, manifestó que la admisión de responsabilidad del Estado en el caso de la UP “es un paso muy importante para resarcir a los miles de víctimas y para poder dejar claramente establecido que contra la UP se realizó un verdadero genocidio de carácter político”. El padre de Cepeda fue asesinado en 1994, pertenecía a la UP.

Finalmente, Santos recalcó que el genocidio que padeció la UP no se repetirá con las FARC, debido a que el 24 de agosto se cerró exitosamente un proceso de paz con el gobierno, para finalizar los más de 50 años de conflictos.

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