La misión de las Naciones Unidas, informó a través de un informe, que al menos 36 personas fallecieron entre ellas 18 civiles, en manos de combatientes talibanes y de la milicia terrorista del autodenominado Estado Islámico (ISIS).
El escrito indica, que la masacre sucedió en un pueblo de la provincia de Sar-1 Pul, al norte de Afganistán. Asimismo, aseguran que el pasado 5 de agosto, los talibanes y los yidahistas de ISIS, invadieron en conjunto un pueblo en el valle de Mirzaolang.
El representante especial de la ONU en Afganistán, Tadamichi Yamamoto, denuncio el asesinato de civiles y personas fuera de combate, lo que catalogo como una “clara violación del derecho internacional”.
Por otra parte, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Jim Mattis, ratificó que Trump dispuso una nueva estrategia para Afganistán luego de un extendido debate, pero recalcó que sería directamente el mandatario quien lo anunciaría.
Los medios de comunicación insistieron en obtener información sobre estas nuevas estrategias, pero Mattis se negó rotundamente a dar detalles sobre el tema. Algunos especialistas pronostican, que el número de tropas en Afganistán podrían aumentar, como una medida frustrada de Trump por acabar con 16 años de guerra.
A pesar de esto, el secretario de Defensa se notaba satisfecho de lo que promulgó será la revisión profunda de la política del gabinete estadounidense. “Estoy muy cómodo con que el proceso estratégico fuese suficientemente riguroso, se escuchó a todos lo que tenían imparcialidad”, resaltó.
“El presidente tomó las decisiones estratégicas”, afirmó Mattis, y ahora “necesita el fin de semana para juntar sus pensamientos sobre cómo lo explicará al pueblo estadounidense”, comentó.
El próximo paso es una gira de cinco días por Oriente Medio y Europa del este, ya este fin de semana el secretario piso Jordania, en donde se reunirá con el rey Abdalá II para conversar temas de seguridad regional.
