La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, quien fuese destituida de su cargo por Asamblea Nacional Constituyente, huyó hacía Colombia siendo una miembro disidente del chavismo.
A las 3:30pm, el Aeropuerto Internacional de El Dorado de Bogotá, fue el primer suele libre de intimidaciones que piso Ortega, luego de llegar a Aruba buscando una salida hacia el vecino país.
Las autoridades colombianas fueron parte de esta arriesgada decisión, recibiéndola y ofreciéndole toda la ayuda que necesitase. Durante el pasado viernes 18 de agosto, la Fiscal uso como un recurso desesperado un traslado en lancha, que la trasladó desde la Península de Paraguaná, hasta Aruba.
Su esposo fue fiel compañía en todo momento, quien también llegó junto a ella a Colombia. El diputado oficialista Germán Ferrer, su jefa de despacho, Gioconda del Carmen González Sánchez y Arturo Vilar Esteves; se unieron a la improvisada huida.
Luego de una larga espera, para conseguir un comunicado oficial, fue la Oficina de Migración Colombia, quien aseguró que Ortega Díaz yacía en su tierra. Todo el revuelo por la situación ha producido una fuerte polémica entre el ojo internacional, que se ha enfocado en Venezuela, desde que las protestas de calles contra el Gobierno de Maduro, se han intensificado.
Dos días antes de su salida del país, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), ordenó que su esposo Germán Ferrer fuese detenido por una supuesta extorción, lo que dio pie a que allanarán su casa legalmente.
Tenemos el detalle de toda la cooperación, montos y personajes que se enriquecieron y esa investigación involucra al señor Nicolás Maduro y a su entorno
El 5 de agosto, los venezolanos pudieron presenciar la primera medida de la Asamblea Constituyente, que cuenta con poderes absolutos sobre el Gobierno, la cual fue destituir a Ortega de sus funciones y prohibir su salida del país, así como también el congelamiento de sus bienes.
Ortega siempre fue una fiel luchadora del pensamiento chavista, trabajando como una de las manos derechas del ex presidente fallecido Hugo Rafael Chávez Frías. Todo esto cambio en marzo del presente año, cuando denuncio públicamente una ruptura en el orden democrático en Venezuela.
No es la primera vez que la Fiscal se arriesga a alzar su voz, en pasadas oportunidades denuncio a Maduro, asegurando que era perseguida por tener en su poder pruebas sobre corrupción y violaciones de los derechos humano. Esto no le convenía para nada al Gobierno oficialista, ya que profesan ser una autoridad transparente y al margen de la ley.
“Quieren con esto esconder las pruebas de Odebrecht, esconder las pruebas de la violación de derechos humanos que se ha dado en este país, los seguiré denunciando”, fue una de las acusaciones hechas por Ortega.
El viernes pasado explotó el tema, después de que Díaz ventilara durante la Cumbre de Procuradores y Fiscales Generales de América Latina, realizada en Puebla, México, muchos de los secretos mejores guardados de Maduro y su frente político, que van desde tráfico de drogas y enriquecimiento ilícito.
“Tenemos el detalle de toda la cooperación, montos y personajes que se enriquecieron y esa investigación involucra al señor Nicolás Maduro y a su entorno”, fue parte de las palabras pronunciadas por la fiscal, por medio de un audio pre grabado.
