Durante el 2016, la OTAN recibió una media de 500 ataques cibernéticos al mes, lo que representa un incremento del 60{85db668b0f501e45db51c03e911509520c47fa73ba3d2725b4a2b675de9388a7} con respecto al año anterior. En la actualidad, el ciberespacio se ha convertido en un campo de batalla que las organizaciones deben enfrentar.
Según los recientes datos divulgados por la organización, han designado a al menos 200 expertos para lidiar con la amenaza desestabilizadora. El secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, afirmó que: “La OTAN se está adaptando a nuevos desafÃÂos. Los ciberataques son una amenaza crecienteâ€Â.
Durante la presentación de su informe anual de 2016, Stoltenberg advirtió que este dominio ha ido ganando importancia como estrategia de desestabilización, con una serie de grupos muy activos radicados en Rusia.
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La OTAN y la UE, iniciaron hace unos meses, un plan de cooperación para luchar contra esos ataques y de manera más amplia, contra la llamada guerra hÃÂbrida, que incluye el uso de propaganda y amenazas a infraestructuras esenciales de un paÃÂs.
Asimismo, la Alianza lanzó el año pasado un fondo fiduciario para ayudar a Ucrania a defenderse contra la amenaza digital proveniente de Moscú. Y la UE creó una unidad de contrapropaganda para desactivar los hechos alternativos que los medios rusos difundÃÂan en toda su área de influencia.
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