Trece años después el Liverpool vuelve a una final del máximo torneo continental de clubes en Europa. Los Reds consiguieron defender con éxito, aunque no sin cierto sufrimiento, el resultado obtenido en la ida en Anfield Road y serán los rivales del Real Madrid en la final de la UEFA Champions League que se disputará en Kiev el próximo 26 de mayo.
Los dirigidos por Jürgen Klopp lograron adelantarse en el marcador en el minuto 09 gracias a un gol de Sadio Mané, precedido por un error del belga Radja Nainggolan. Apenas 6 minutos después los locales empataban el marcador tras un autogol de James Milner. Georginio Wijnaldum, al 25, lograba la ventaja para la visita luego de un mal despeje del delantero Edin Dzeko.
El segundo tiempo comenzó con los locales buscando el gol que empatara el marcador y lo consiguieron por intermedio del bosnio Edin Dzeko en el minuto 52. A partir del momento el conjunto capitalino intensificó la búsqueda de un gol que los acercara al objetivo de igualar la eliminatoria, pero las anotaciones llegaron en las postrimerías del encuentro. El belga Radja Nainggolan consiguió par de anotaciones al minuto 86 y al 90+4 de penal, quedando así a un gol de la prórroga.
El encuentro no estuvo exento de polémica ya que el árbitro esloveno Damir Skomina dejó de pitar una clara pena máxima para los locales en el primer tiempo por mano de Trent Alexander-Arnold dentro del área. Los reclamos de los jugadores romanistas fueron en vano.
La final del próximo 26 de mayo tendrá un especial halo de revancha para la escuadra madridista ya que fue precisamente el Liverpool el último equipo en ganarle una final en este torneo en 1981.