El presidente de Francia, Emmanuel Macron, se reunió el lunes con un migrante de Malí elogiado como un héroe por escalar un edificio de apartamentos para salvar a un niño pequeño que se encontraba colgando de un balcón.
Macron expresó que Mamoudou Gassama, de 22 años, sería recompensado por su “acto excepcional” con documentos para legalizar su estadía, ciudadanía si lo desea y un trabajo como bombero.
“Bravo”, dijo Macron a Gassama durante una reunión uno a uno en una habitación dorada del palacio presidencial del Elíseo que finalizó con la entrega de una medalla de la prefectura por “coraje y devoción”.
La hazaña de Gassama se volvió viral en las redes sociales, donde fue apodado “Spiderman” por subir cinco pisos, de balcón en balcón, y llevar a un niño de cuatro años a la seguridad, el sábado por la noche mientras una multitud gritaba al pie del edificio en el distrito 18 del norte de París.
El joven explicó que tiene documentos para quedarse legalmente en Italia, donde llegó a Europa después de cruzar el Mediterráneo tras una larga y dura estancia en Libia. Pero quiere unirse a su hermano mayor, que ha vivido en Francia durante décadas.
Gassama, vestido con pantalones vaqueros y camisa blanca, relató su experiencia que tuvo lugar alrededor de las 8 p.m., el sábado, cuando él y sus amigos vieron a un niño colgando de un balcón en el quinto piso.
“Corrí. Crucé la calle para salvarlo “, le dijo a Macron. Asimismo, asegura que no lo pensó dos veces: “Cuando comencé a escalar, me dio coraje para seguir escalando” dijo Gassama. “Dios también me ayudó, gracias a Dios que lo salvé”.
“Debido a que este es un acto excepcional… obviamente, hoy, vamos a regularizar todos sus papeles”, le dijo Macron, y también ofreció comenzar los procedimientos de naturalización para que pueda convertirse en francés.
Macron está detrás de un proyecto de ley que endurece la legislación de inmigración francesa, y enfatizó que no hay contradicción entre recompensar a Gassama por su acto de valentía y mantenerse firme en la inmigración, lo que el presidente quiere detener en su origen.
“Un acto excepcional no constituye una política”, dijo más tarde a los periodistas, y prometió mantener una política que es “exigente, respetuosa de nuestros principios” en materia de asilo y “rigurosa” con respecto al flujo migratorio.
“Has salvado a un niño. Sin ti, nadie sabe qué hubiera sido de él “, dijo el presidente. “Se necesita coraje y la capacidad para hacer eso”. Trabajar como bombero se corresponde con sus habilidades, aseguró Macron, y le abrió la puerta para que se uniera a la fuerza de rescate de París.
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