Un agente de policía de Edmonton acusado de tráfico de esteroides anabólicos entre 2007 y 2013 ha sido declarado culpable. El ex miembro de la unidad de drogas y pandilla, Det. Greg Lewis, enfrentó tres cargos de tráfico después de que fue arrestado en marzo de 2016 luego de una investigación de dos años realizada por el Equipo de Respuesta a Incidentes Graves de Alberta (ASIRT).
El juez Scott Brooker declaró culpable a Lewis de dos cargos de tráfico de una sustancia controlada, pero no culpable de un tercero debido a un testimonio de testigo poco confiable. El hombre de 36 años fue uno de los dos oficiales acusados como resultado de la investigación del perro guardián de la policía.
En junio de 2016, Darren French, de 51 años, se declaró culpable de dos cargos de trata de una sustancia controlada. Se ordenó al entonces agente pagar una multa de $ 1,500 y se le otorgaron 18 meses de libertad condicional y 240 horas de servicio comunitario.
Seis oficiales fueron identificados en la investigación ASIRT por haber comprado y usado esteroides en violación del código de conducta de la fuerza, pero los investigadores creyeron que al menos 30 oficiales habían usado la sustancia.
La investigación, que se centró en eventos que se remontan a casi una década atrás, fue un escándalo público para el Servicio de Policía de Edmonton (EPS). En el momento en que la policía de Alberta anunció que Lewis y French habían sido arrestados y acusados, el jefe de policía Rod Knecht dijo que se trataba de un incidente aislado, pero que aún era perjudicial para la imagen de la fuerza.
La investigación de ASIRT encontró que no había evidencia que sugiriera que el tráfico de esteroides fuera una operación comercial “era un problema sistémico o generalizado” en todo el departamento de policía. Los cargos, sin embargo, llevaron a la policía a crear una política interna que prohíbe a los agentes el uso o la posesión de esteroides.
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