Las autoridades han enviado cartas a más de 1.300 pacientes de diabetes, en donde se les recomienda realizarse una prueba que descarte un posible contagio de hepatitis B y C, debido a que demostraron que dos centros de salud de Edmonton no realizan los procedimientos de salubridad adecuadamente.
Covenant Health, comunicó que existe un riesgo muy bajo de que los pacientes se expusieron a los virus durante el entrenamiento con inyección de insulina en el Grey Nuns Community Hospital y Misericordia Community Hospital entre 2013 y 2016.
A pesar de ello, hacen un llamado para que las dudas sean disipadas a través de dicho examen. Asimismo, recalcaron que aunque agujas siempre fueron cambiadas durante las sesiones de entrenamiento, los depósitos de solución salina y las almohadas de la práctica se reutilizaron entre algunos pacientes.
La ministra asociada de salud de Alberta, Brandy Payne, expresó que “la cantidad de tiempo que tomó para investigar este incumplimiento y luego notificar a los pacientes es preocupante”.
El médico jefe de Covenant Health, el doctor Owen Heisler, pidió disculpas por “crear ansiedad”, prometió de igual forma abocarse a indagar por qué tomó tanto tiempo para los pacientes fuesen informados sobre las malas condiciones de las prácticas, las cuales cesaron hace 16 meses.
“Si nuestras enfermeras y nuestro personal, hubiesen sabido que había riesgos, no habrían hecho esto”, añadió el jefe del centro médico. Por su parte, la directora de Diabetes Canadá, la doctora Jan Hux, indicó que se siente consternada, ya que los procedimientos deben ser corregidos urgentemente.
En los próximos días todas aquellas personas que fueron parte de estos entrenamientos, deben realizarse los exámenes pertinentes. Los gastos correrán por parte de los centros médicos involucrados en la situación.
