Andrés Lozano es un neurocirujano que dirige a un equipo pionero de cientÃÂficos en el Hospital Western de Toronto, donde aplican una técnica revolucionaria llamada estimulación cerebral profunda, por medio de la cual tratan pacientes con diferentes enfermedades neurológicas y psiquiátricas como el alzhéimer, párkinson, depresión, anorexia, epilepsia, entre otras muchas patologÃÂas.
La técnica desarrollada por Lozano ya ha sido aplicada exitosamente a más de 120.000 pacientes de todo el mundo, además, es una de las más prometedoras para el tratamiento de trastornos neurológicos y psiquiátricos que afectan al cerebro. Esta investigación fue iniciada en la de década de los 90.
“Se trata de encender partes del cerebro que, por una razón u otra, se han apagado. Para ello se usa un estimulador cerebral profundo, que se coloca en cualquier parte del cerebro que necesite el paciente, haciendo un agujero del tamaño de una pequeña moneda. Ahàse coloca un electrodo que se conecta a un marcapasos situado en el pechoâ€Â, precisó Lozano, durante una su conferencia en el World Science Forum de Budapest.
Explicó que esta técnica es similar a sintonizar una emisora de radio. “La localizamos y fijamos el dial. Luego podemos usar otro botón para subir y bajar el volumen, que es el equivalente a graduar la cantidad de electricidad que queremos que llegue a esa parte del cerebro. Según los circuitos que estimules, tienes efectos y mejorÃÂas diferentes, dependiendo de la enfermedad y el sistema especÃÂfico que esté dañadoâ€Â, añadió.
Lozano dijo que luego de que se realiza la intervención, el médico puede ajustar cuánta electricidad descarga en las áreas afectadas mediante un control, esto, hasta que el circuito cerebral recupera su funcionalidad. Uno de los resultados más impresionantes que expuso y presentó el neurocirujano durante su conferencia, fue el caso de una paciente de parkinson que justo cuando activan el dispositivo los temblores desaparecen como por arte de magia.
La estimulación cerebral profunda ha mejorado la calidad de vida de cientos de pacientes que prácticamente se encontraban desahuciados en todo el mundo. No obstante, desde que se comenzó a emplear la técnica desde el 1997, la suerte de muchos de ellos cambio gracias a la invención de Andrés Lozano, quien durante once años consecutivos fue el neurocirujano más citado del mundo por ser el pionero de esta terapia.
Actualmente, hay más de cien ensayos en todo el mundo que están aplicando esta técnica para tratar distintas enfermedades e incluso para acabar con adicciones a la cocaÃÂna, el alcohol o la heroÃÂna, con resultados verdaderamente prometedores.
â€ÂLa técnica ha demostrado potencial incluso para despertar pacientes en coma, pero ese es un campo que será explorado en el futuroâ€Â, agregó el cientÃÂfico.