Según los datos del estudio Panorama de la Seguridad Alimentaria y Nutricional de América Latina 2016, elaborado por la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) y la OPS (Organización Panamericana de la Salud) el 63{85db668b0f501e45db51c03e911509520c47fa73ba3d2725b4a2b675de9388a7} de los adultos en Chile tiene sobrepeso.
El informe advierte que los chilenos consumen cada año 201,9 kilos per cápita de alimentos ultra procesados. Esta cifra representa un incremento significativo de más de 60{85db668b0f501e45db51c03e911509520c47fa73ba3d2725b4a2b675de9388a7}, ya que en el informe del año 2.000 se registró un consumo de 125,5 kilos por persona.
De acuerdo con los expertos, la ingesta de este tipo de productos que se elaboran a partir de sustancias derivadas de alimentos u otras fuentes orgánicas, mediante procesos como la hidrogenación o la hidrolización, es atribuible al elevado precio de algunos alimentos saludables y al fácil acceso a la comida rápida o fast food.
Asimismo, a Chile le sigue en esta lista Venezuela, con un 62,3{85db668b0f501e45db51c03e911509520c47fa73ba3d2725b4a2b675de9388a7} de sobrepeso y Uruguay con un 61,7{85db668b0f501e45db51c03e911509520c47fa73ba3d2725b4a2b675de9388a7}. La Organización Mundial de la Salud, ha recomendado evitar el consumo de productos ultra procesados y sustituirlos por alimentos naturales, para frenar la pandemia de obesidad y prevenir las consecuencias del exceso de peso sobre la salud.