Hace pocos días, en solo 90 minutos, cinco personas fueron atacadas con ácido en distintos barrios de Londres. En el mes de junio 20 personas resultaron heridas al arrojarles sustancias corrosivas, por una persona que ingresó a una discoteca en la capital británica.
Las autoridades han informado que desde el año 2012, los ataques con ácido se han intensificado en Inglaterra, llegando a duplicar las cifras. La jefa para ataques con sustancias corrosivas del Consejo Nacional de Jefes de Policía, Rachel Kearton, manifestó a través de la BBC, que estás agresiones acuden a un objetivo en común, lo que evidencia que no son cometidos al azar.
Una de las víctimas es Imra Khan, quien fue intersectado por un grupo de jóvenes que pedían dinero y comida. Luego de gritar insultos de tilde racista, lo atacaron con ácido en la cara.
Las cifras publicadas por la Policía Metropolitana, indican que los hombres se encuentran más propensos a sufrir dichos ataques. La mayoría de estos casos nunca son juzgados, ya que los culpables huyen y resultan ilesos de todo proceso penal.
El criminólogo y experto en bandas de la Universidad de Middlesex, Simon Harding, considera que ya se ha convertido en un modus operandi para los criminales de la ciudad.
“Lanzar ácido es una forma de demostrar dominio, poder y control, creando un enorme temor entre los miembros de las bandas rivales”, aseguró el experto. Si atrapan a criminal con un arma blanca las condenas son mucho mayores, al igual que las que son imputadas por atacar con ácido.
Las autoridades también han señalado que iniciarán una investigación para conocer los motivos de esta creciente ola de agresiones y saber si están involucradas por posibles crimines de odio.
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