La casa de cambio de criptomonedas, QuadrigaCX, se ha declarado en bancarrota tras deber a sus 115.000 clientes, al menos 190 millones de dólares a los que no tiene acceso. Luego de la muerte de su fundador, Gerald Cotten, quien falleció el pasado mes de diciembre sin compartir la contraseña de acceso a los monederos en los que almacenaba los bitcoin y otras criptodivisas, la empresa no tiene cómo funcionar.
La casa de cambio de criptomonedas, QuadrigaCX, se ha declarado en bancarrota tras deber a sus 115.000 clientes, al menos 190 millones de dólares a los que no tiene acceso. Luego de la muerte de su fundador, Gerald Cotten, quien falleció el pasado mes de diciembre sin compartir la contraseña de acceso a los monederos en los que almacenaba los bitcoin y otras criptodivisas, la empresa no tiene cómo funcionar.
Sin embargo, la muerte del canadiense que fundó QuadrigaCX ha despertado muchas especulaciones de que el exchange de criptomonedas, podría tratarse de una estafa multimillonaria. Según reveló recientemente Bloomberg, Cotten habría tramitado su testamento sólo 12 días antes de su muerte, dejando atrás una cantidad sustancial de bienes personales.
Gerald Cotten, de 30 años de edad y quien era CEO y fundador de la empresa más grande de cambio de criptomonedas en Canadá, falleció el 9 de enero de 2018 a causa de complicaciones en la enfermedad de Crohn, durante un viaje de ayuda humanitaria a India.
Cotten era la única persona con acceso a las contraseñas conectadas a los fondos de alrededor de 92.000 de sus clientes. La junta directiva de la compañía con sede en Vancouver indicó que presentó una solicitud de protección a los acreedores ante el Tribunal Supremo de Nueva Escocia, en un intento de ganar tiempo para abordar “problemas financieros importantes” afectando su capacidad de servir a sus clientes, según una declaración en su sitio web.
“Durante las últimas semanas, hemos trabajado extensamente para abordar nuestros problemas de liquidez, que incluyen el intento de localizar y asegurar nuestras muy significativas reservas de criptomonedas almacenadas en billeteras frías, y que son necesarias para cubrir los saldos de criptomonedas de los clientes en depósito”, dijo la firma. “Desafortunadamente, estos esfuerzos no han tenido éxito”.
En el testamento de Cotten, firmado el 27 de noviembre de 2018, nombraba a su esposa como albacea y ejecutora y, según el periódico The Globe and Mail, en el mismo se reservaban US$ 76.000 para el cuidado de los dos perros de la pareja. No obstante, el testamento no incluyó detalles sobre cómo acceder a los fondos de Quadriga en caso de muerte.
