Un bosque antiguo, cerca del área de Edmonton se está protegiendo como oasis natural después de que fue adquirido por la organización Conservación de la naturaleza de Canadá y el Edmonton and Area Land Trust.
Varias familias donaron una porción de las 260 hectáreas del bosque del condado de Parkland, a los grupos de conservación y luego las vendieron a un precio por debajo del valor de mercado. Es un bosque denso de pinos con abundante vida silvestre, los representantes lo describen como un oasis y añaden: “Nuestra esperanza es que podamos mejorar el sistema de senderos para que el público pueda acceder a él”.
El vicepresidente regional de la Conservación de la Naturaleza de Canadá, Bob Demulder, recalcó los beneficios de esta porción de bosque protegido para la comunidad: “Está justo a las puertas de la ciudad de Edmonton y la mayor región de la capital donde hay más de un millón de personas”.
Asimismo, añadió: “A medida que el público se urbaniza, su exposición a la naturaleza se vuelve cada vez menor y es nuestro trabajo mantener esas oportunidades disponibles”.
Los grupos no pueden completar ningún trabajo en la propiedad hasta que finalice la temporada de anidamiento, de acuerdo con la Ley de la Convención de Aves Migratorias del Canadá. Esperan tenerla abierta al público en el otoño.
Por otra parte, el gobierno de Alberta aportó para el proyecto Bunchberry Meadows, alrededor de $ 1,1 millones en fondos provinciales, a través del Programa de Subsidios de Alberta Land Trust, creado en 2011.
“Significa mantener el agua en el paisaje, significa poder adaptarse al cambio climático”, dijo la ministra de Medio Ambiente de Alberta, Shannon Phillips. “Creo que, lo que es más importante, significa un legado para las cinco familias que donaron esta tierra para las generaciones futuras”.