Más de 10,300 canadienses murieron como resultado de una sobredosis aparente relacionada con opioides entre enero de 2016 y septiembre de 2018, según informa la Agencia de Salud Pública de Canadá.
“Durante los primeros nueve meses de 2018, 3,286 canadienses perdieron la vida por aparentes sobredosis relacionadas con opioides“, dijo la agencia en un comunicado el miércoles. Asimismo, los nuevos datos publicados muestran que más de 3,200 canadienses murieron por la misma causa entre enero y septiembre del año pasado.
Los datos también indican que el fentanilo y otras sustancias relacionadas con el fentanilo continúan siendo el “principal impulsor” de la crisis de los opioides en Canadá, con el 73% de las muertes accidentales aparentes relacionadas con los opioides en el lapso de nueve meses que involucran la potente droga analgésica.
La salud pública indica que la crisis continúa afectando a todo el país, pero ciertas regiones, como B.C., Alberta y Ontario, se han visto más afectadas que otras. Las muertes aparentes relacionadas con opioides se registran a través de los datos proporcionados por las provincias y territorios de las oficinas de los principales forenses o examinadores médicos.
Los opiáceos pueden ser difíciles de separar de otros factores en una muerte, incluidas las diferentes drogas y las enfermedades subyacentes, por lo que los números toman mucho tiempo para llegar a un punto crítico y vienen con calificadores.
La Dra. Theresa Tam, directora de salud pública de Canadá, señala que las cifras recién publicadas sirven como un “recordatorio” de la importancia de mantener y aumentar los esfuerzos para detener la epidemia.
Los últimos datos “reafirman que todos los canadienses están siendo afectados, directa o indirectamente, por esta epidemia“, dijo el Dr. Saqib Shahab, jefe de salud médica de Saskatchewan y copresidente del comité asesor especial sobre la epidemia de sobredosis de opioides.
La epidemia de opioides incluye no solo analgésicos legales, sino también drogas ilícitas como la heroína y el fentanilo. Según las cifras del gobierno, las sobredosis fatales relacionadas con los opioides han reducido la esperanza de vida de los EE. UU. y han matado a más de 400,000 personas desde 1999.
