La definición de procrastinación según del diccionario proviene del latín procrastinare: pro, adelante, y crastinus, referente al futuro, postergación o posposición es la acción o hábito de retrasar actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o agradables.
Por otra parte, el acto de procrastinar deriva de la evasión que desarrolla el ser humano, al no querer enfrentar situaciones que le son complejas o difíciles, pues es mucho más fácil entrar en el juego de buscar entretenciones que le hagan olvidar la responsabilidad que implican cumplir con aquello que está obligado a concretar.
Ahora bien, la pregunta que viene frente a esta situación, es porqué las personas prefieren escapar, no enfrentar y estar en la incomodidad o la preocupación antes que lograr una respuesta satisfactoria para el problema que se presenta. Si observamos la conducta humana, por una parte, esta se encuentra sobrepasada ante la alta exigencia que el sistema le confiere, es decir, nivel de deudas importantes, preocupaciones por las obligaciones impuestas frente a la familia, el trabajo o bien, tan solo el hecho de comportarse de manera amable con todo el mundo, con tal de no pasar como alguien desagradable o mal educado, sin darle la oportunidad de fluir naturalmente frente a sus propias emociones.
Se ha enclavado a la humanidad en una conducta restrictiva, con grandes cargas sobre sus hombros, hecho que evidentemente le provoca una sobresaturación de situaciones complejas, ante las cuales y en su sentir más profundo, ya no quiere tener más peso del que lleva encima.
Existe una ingeniería social, donde las personas en muy pocas oportunidades tienen la posibilidad de vivir tranquilos, podemos observar que las comunicaciones son parte de este casi complot, como una forma de mantenerlas esclavizadas y no puedan defenderse ni menos tener tiempo para observarse a sí mismos, basta solo con mirar lo que sucede en el mundo, para darnos cuenta que todo está basado en la tragedia o la destrucción, ocultando toda la contraparte, que es la belleza de otros acontecimientos importantes que están sucediendo en este planeta.
Estamos en una era de cambios, no es necesario seguir procrastinando, tan solo basta con enfrentar los hechos desde lo constructivo y observar lo destructivo desde una objetividad, sabiendo que es parte de un sistema y no de nuestra individualidad.
Somos creadores de nuestro propio mundo, en la medida que aceptamos que tenemos dentro de cada uno de nosotros la enorme posibilidad de revertir cualquier situación adversa que se nos presente, teniendo una mirada amplia, saliendo del laberinto y observando desde la distancia del sistema para de esa forma, lograr la auto observación y la auto acogida.
Tome su decisión y enfréntese con hidalguía, usted puede, tiene la enorme facultad de lograr sus propios objetivos y salir adelante sin necesidad de postergarse, tan solo priorizándose usted consigo mismo.
PAOLA RIOSECO PRADO