Neurocientíficos encuentran que el embarazo cambia el cerebro de las mujeres

    807
    0

    De acuerdo a una investigación realizada por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y el Instituto de Investigación del Hospital del Mar (IMIM), las mujeres durante el embarazo pierden materia gris en el cerebro para incrementar su sensibilidad, lo que les permite reconocer el estado emocional de su bebé o incluso detectar cualquier amenaza.

    El estudio no encontró que el embarazo provoque ningún cambio ni en memoria ni en otras funciones intelectuales en las mujeres estudiadas, puesto que la pérdida de sustancia gris no implica ningún déficit cognitivo, sino que el cerebro vendría ha ser reestructurado con nuevos estímulos de fines adaptativos.

    Este artículo también le puede interesar: Ya es posible predecir un infarto con una prueba de sangre

    La investigación de la UAB e IMIM demuestra que el embarazo implica cambios que se mantienen a largo plazo en la morfología del cerebro de la madre y que no solo son hormonales radicales, sino que estos responden más al tipo biológico. Sin embargo, estos efectos en el cerebro son todavía poco conocidos.

    Durante su estudio mediante el análisis de imágenes de resonancia magnética, los científicos observaron como en las mujeres que han vivido su primer embarazo, se reduce el volumen de la materia gris en regiones implicadas en las relaciones sociales.

    Los investigadores estudiaron 25 mujeres durante y después de su embarazo, asimismo, tomaron otras 20 mujeres que no estaban ni habían estado embarazadas, esto durante un lapso de cinco años y cuatro meses. Los resultados fueron publicados en Nature Neuroscience.

    Los neurocientíficos encontraron que en las mujeres embarazadas hubo una reducción simétrica en el volumen de la sustancia gris en la línea media cortical anterior y posterior, así como en secciones específicas de la corteza prefrontal y temporal, zonas que forman un mapa asociado a los procesos implicados en las relaciones sociales.

    Creemos que la reducción se debe a un proceso similar a la poda sináptica que tiene lugar durante la adolescencia, donde se eliminan las sinapsis débiles para favorecer un procesamiento mental más maduro y eficiente”, precisó una de las líderes de la investigación, Susanna Carmona.

    La reducción de materia gris que se dio en todas las mujeres embarazadas estudiadas fue exclusivo, es decir, que se trata de un cambio biológico producto del embarazo, y no por el nacimiento del bebé como puede pasar con los padres.

    “Los resultados apuntan a que esta plasticidad cerebral inherente al embarazo tiene un fin evolutivo destinado a que la madre infiera eficientemente las necesidades de su bebé”, explicó la primera autora del artículo, Erika Barba-Müller junto a Elseline Hoekzema.

    Comments

    comments

    Artículo anteriorLos 10 youtubers con más suscriptores del 2016
    Artículo siguienteA sus 80 años, el Papa Francisco solo desea tener una vejez “tranquila y feliz”