Patricia Grell, fideicomisaria del noroeste de Edmonton, quien frecuentemente se enfrentó con sus colegas y administradores de la junta directiva, publicó un escrito en su blog acusando a sus colegas de darles la espalda a los administradores del distrito escolar.
Aseveró, que existe un sistema paralelo de escuelas católicas que está desperdiciando los dólares de los contribuyentes con servicios innecesariamente duplicados.
También afirmó, que el clero está sobrepasando su papel de asesor en las escuelas católicas e interfiriendo con los intentos del consejo de escribir políticas. “Es difícil para mí estar de pie y verlos usar nuestras escuelas católicas financiadas al 100 por ciento, para promover su odio e intolerancia”, plasmó Grell en su blog.
Un punto de conflicto para los alumnos durante los últimos dos años, ha sido cómo conciliar su fe con las nuevas leyes sobre las personas LGBT. La fideicomisaria ha sido fiel defensora de dicha población dentro de los planteles educativos.
En una carta de enero de 2016, el arzobispo Richard Smith expresó que los miembros del consejo traicionaron la confianza de los electores cuando discutieron públicamente sobre el tema de la comunidad LGBT.
Por lo que Grell aseguró que uno de los cleros, al que prefirió no identificar, indicó durante una junta directiva a puerta cerrada, que “tal vez las escuelas católicas no son el lugar para los estudiantes transgéneros”.
Aunado a esto la bloguera denunció que el arzobispo de Edmonton, amenazó con retirar la designación católica de la junta escolar en 2014, cuando los estudiantes discutieron la adopción de una política de orientación sexual y de identidad de género.
Debbie Engel, quien ha sido parte del consejo durante 19 años, no recuerda ningún comentario del clero sobre los niños transgéneros. Añadió, que Grell está rompiendo las reglas publicando información que obtuvo en confianza mientras estaba en la directiva.