Canadá impondrá nuevas cuotas y aranceles a las importaciones de siete categorías de acero, según informó el gobierno federal. Las nuevas medidas son para evitar un aumento potencial de las importaciones, ya que los fabricantes de acero en el extranjero que no tienen acceso a los Estados Unidos buscan nuevos clientes.
A partir del 25 de octubre de 2018 se aplicará un arancel del 25 por ciento a las importaciones “en los casos en que el nivel de las importaciones de los socios comerciales supere las normas históricas”, según el comunicado del gobierno.
Los productos cubiertos incluyen chapas gruesas, barras de refuerzo de hormigón, productos tubulares de energía, chapas laminadas en caliente, acero prepintado, entre otros.
Canadá no tiene muchas esperanzas de que Washington aumente rápidamente los aranceles que impuso a las exportaciones de acero y aluminio, y se resiste a un impulso de Estados Unidos para acordar cuotas estrictas, dijeron dos fuentes familiarizadas con el tema.
La administración del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, impuso los aranceles a Canadá y México en junio, citando razones de seguridad nacional. Aunque Canadá y México acordaron un acuerdo comercial continental renovado la semana pasada, las medidas siguen vigentes.
Canadá es el mayor proveedor individual de aluminio y acero de los Estados Unidos. A Washington le preocupa que las naciones puedan intentar enviar suministros a través de Canadá y simular que los metales se han producido en las instalaciones canadienses.
En marzo, Estados Unidos firmó un acuerdo con Seúl mediante el cual, a cambio de un fin de los aranceles al acero, Corea del Sur acordó recortar las exportaciones en un 30 por ciento del promedio de los últimos tres años.
Durante las conversaciones sobre el nuevo Acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá (USMCA), los funcionarios de los Estados Unidos dijeron a Canadá que querían un acuerdo similar para el acero y el aluminio, aseguró una fuente, declinando dar detalles específicos.
Canadá rechazó la demanda y dejó en claro que cualquier límite en los metales habría estado a un nivel más alto que las exportaciones actuales para permitir que los envíos crezcan.
Exportaciones comunitarias de frutas y hortalizas quedan exentas de impuestos arancelarios